La discusión sobre la cuestión impositiva argentina está activa en esta última parte del año 2024. En este análisis se detallan las características de dos bajas de impuestos para el año 2025: la de un impuesto no legislado como la inflación y la de un impuesto legislado como el impuesto PAIS.
Para proyectar el impuesto inflacionario, se trabaja con dos escenarios alternativos que se describen detalladamente en el informe.
Bajo el primer escenario, se proyecta una baja del impuesto inflacionario de 2,7 p.p. del PBI para 2025 y bajo el segundo escenario se proyecta una baja de 2,5 p.p. del PBI. Del análisis realizado, se concluye que el peso relativo del impuesto inflacionario va a tener una baja importante en el año 2025.
Por lo tanto, para 2025 la desaparición del impuesto PAIS deja de incidir en un 1,1% del PBI y la baja del impuesto inflacionario debería ser de al menos un 2% del PBI. En efecto, la baja del impuesto inflacionario se transformaría en la primera baja relevante de impuestos de los próximos años.
¿La desaparición del impuesto PAIS implica que bajará la carga tributaria en 2025?
La respuesta a esta pregunta relevante es: depende de la acción que lleve adelante el gobierno nacional. Y hay dos aristas elementales: la de la carga tributaria y la de la presión tributaria. La primera tiene que ver con las cuestiones legales de los impuestos, como la base y las alícuotas. La segunda, con la recaudación efectiva que aporta cada impuesto.
Si el gobierno nacional no modifica la estructura legal de ningún impuesto nacional en 2025, es decir que no cambia las alícuotas legales efectivas existentes a fines de 2024, pero igualmente logra aumentar la recaudación efectiva, puede ocurrir que con menor carga tributaria legal obtenga una mayor presión tributaria efectiva, algo que sería muy deseable.
Para responder la pregunta realizada, se vuelve a afirmar que depende de la acción del gobierno nacional en materia tributaria. Lo que es un hecho es que bajará el peso relativo del impuesto inflacionario, impuesto no legislado, luego de alcanzar máximos tanto en 2023 como en 2024.